Los derechos humanos han cobrado mayor importancia en las últimas décadas del siglo XX y en los primeros años del presente siglo, derechos tales como la alimentación, la vivienda y una vida digna son incluidos en la mayoría de las constituciones nacionales. Ante este nuevo paradigma se encuentran grandes retos como buscar la manera de hacerlos exigibles, ya sea en forma ordinaria o judicial. En este contexto es necesario que algunos de estos derechos estén previstos en nuestra Carta Magna, como el derecho a una pensión o jubilación suficiente que le permita a una persona tener una vida digna después de haber concluido su vida laboral; y es que no hay que olvidar que el derecho a la vida es, por ende, el más importante de los derechos humanos y en consecuencia a que esta sea digna.